Una nueva fórmula jubilaría fue aprobada por el Congreso de la Nación e implicará cambios en las jubilaciones y sus actualizaciones futuras. Te contamos cuáles son los puntos más importantes.
El Senado de la Nación sancionó por 61 votos a favor y 8 en contra una nueva ley de movilidad jubilaría con cambios importantes en la forma actual que se utiliza para actualizar los haberes de los jubilados de ANSES.
La iniciativa convertida en Ley mantiene la actualización por IPC que contenía el decreto de necesidad y urgencia (DNU) del Gobierno, pero le agrega un incremento adicional del 8,1% a las jubilaciones del mes de abril, con el objetivo de completar el 20,6% de inflación correspondiente a enero.
Al mismo tiempo, el texto aprobado, deja establecido que el haber mínimo no podrá ser inferior a 1,09 canastas básicas de adulto (dato que publica el INDEC y define la línea de pobreza).
Este punto significa que, por ejemplo, en la actualidad, nadie podría cobrar menos de $321.600, quince mil pesos más que el monto pagado en junio.
La norma también prevé incluye un cambio significativo en la fórmula de movilidad, para que la misma no dependa solo de la inflación, sino también de los salarios.
Así, a partir de ahora, el cálculo de la jubilación incluirá una revisión semestral, incluyendo un ajuste del 50% de la variación entre la Remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE) y la inflación, cuando está sea menor.
El proyecto convalidado, también establece un plazo de seis meses para cancelar las deudas previsionales por juicios con sentencia firme y las que tiene el Estado con las cajas provinciales.
Jubilación mínima: ¿Cómo quedaría con la nueva fórmula?
Con la nueva fórmula de movilidad, la jubilación mínima pasará a ser (incluyendo el bono de $70.000) de $321.425,80.
Al mismo tiempo se deberá evaluar el nuevo piso que establece la ley de un 1,09 de la canasta básica de adulto, que hasta julio fue de 317.704,48 pesos.